Fran Rivera pierde una demanda de 150.000 euros contra Telecinco

Fran Riveramediaset.es

Tras Pepe Navarro y Gonzalo Miró, Francisco Rivera. El Tribunal Supremo ha vuelto a dar la razón a Telecinco, a quien en este caso el torero reclamaba 150.000 euros al entender que se había vulnerado su intimidad. Rivera demandó a la cadena después de que Aquí hay tomate y TNT difundireran unas manifestaciones del periodista Miguel Temprano, en las que aseguraba haber visto al diestro comer con la presentadora Anne Igartiburu en un conocido restaurante de Madrid días antes de su boda con Eugenia Martínez de Irujo.

El Alto Tribunal confirma la decisión de la Audiencia Provincial, que previamente ya había ratificado la Sentencia de Primera Instancia, en la siguiente resolución: "Como se dice en la sentencia recurrida, habiéndose conferido a la boda (del propio Fran Rivera y Eugenia Martínez de Irujo) la trascendencia de un acontecimiento de interés público, los comentarios que años después del evento se hagan sobre las circunstancias que rodearon al enlace, cuando el propio interesado ha manifestado a través de una autobiografía determinados aspectos de su vida, entre los que ocupa un lugar destacado su boda, no atentan a su intimidad, resultando así una voluntad clara de poner ciertos aspectos de su vida personal y familiar en público conocimiento y fuera del ámbito de lo reservado".

Por último, el Supremo, además de rechazar la reclamación de Fran Rivera, condena a éste a asumir las costas del proceso en sus tres instancias.

Con esta nueva resolución favorable a Telecinco, son ya cuatro los fallos a favor de la cadena en distintos procesos recientes. Por una lado, las absoluciones dictadas por el Supremo ante las demandas presentadas por los presentadores Pepe Navarro, que reclamaba 100.000 euros por una supuesta vulneración de su honor, y Gonzalo Miró, que solicitaba otros 100.000 euros por una presunta intromisión ilegítima en su intimidad y su derecho a la propia imagen.

A éstas se suma la dictada por la Audiencia Provincial de Barcelona ante la demanda presentada por Antonia Dell’Atte y su hijo Clemente Lecquio, que exigían una indemnización de 70.000 euros por una supuesta vulneración de su imagen e intimidad.