Este Carnaval, crea tu disfraz reciclando materiales

@page { margin: 2cm } P { margin-bottom: 0.21cm } A:link { so-language: zxx } Este año toca ser ingenioso y aprovechar los materiales y objetos que puedes encontrar en casa. Este año el Carnaval va de la mano del reciclaje, porque tienes todos los elementos que necesitas a mano, solo tienes que pensar cómo reutilizarlos.

Llama a tus amigos, o reúne a los pequeños de la casa y poneros manos a la obra. Además de pasarlo bien en la fiesta también os divertiréis fabricando vuestro modelito. Y tanto si ya habéis decidido disfraz como si vais a utilizar algunas de las claves que os vamos a dar a continuación, nos encantaría ver vuestras creaciones. Compártelas a través de nuestro perfil de Twitter y nuestra página de TwitterFacebook

Cajas de cartón

El cartón es un material mágico, ¡puede transformarse en cualquier cosa! Y si la caja es grande, todavía tendrá más posibilidades. Píntalo, pégale objetos, decóralo, recórtalo, dóblalo y verás todo lo que consigues. Si tu caja es cuadrada, con un poco de pintura y unos agujeros para sacar la cabeza y las extremidades, puedes convertirte en un 'Cubo de Rubik' o un dado. Apilando varias con diferentes formas y coloreándolas, tú y tus amigos seréis las piezas de una partida viviente de Tetris, o pegándole unos cuencos cilíndricos, os transformaréis en piezas de Lego, como nos enseñan en 'Wordever'. También sirven para hacer máscaras geniales, como la de elefante y el pulpo que proponen en el blog 'Cuarta R', o la del increíble Hulk de 'Disfraces de reciclaje'.

Telas y sábana viejas

Otro recurso es abrir el armario del ajuar en el que se amontonan mantas y sábanas viejas que todavía no sabes muy bien para qué guardas. ¡Pues ha llegado su momento! Puedes reconstruir un disfraz utilizando estas telas, y no necesariamente tendrás que ponerte a coser. Si le haces dos agujeros para los ojos a una sábana blanca puedes hacerte el clásico disfraz de fantasma. Si es de otro color puedes ser un espectro muy fashion. Si le haces un agujero en el centro y te la pones a modo de poncho, con un poco de pintura negra en la cara puedes lucir como un cantante de coro gospel. Para esta opción también puedes meter relleno dentro de tu ropa y aumentar de volumen. Queda divertidísimo.

Bolsas de basura, una opción camaleónica

En el colegio nos enseñaron que hay bolsas de basura de todos los colores, y que puedes cortarlas y unirlas con celo para diseñar tus propios modelitos. Es una forma muy sencilla de darle un uso creativo a las bolsas de plástico. Puedes decorarlas, forrarlas, construir flecos con ellas, alas de murciélago, capas de súper-héroe e incluso pelucas.

Buscando en el armario

Todos tenemos ropa que, bien combinada, podría convertirnos en personajes carismáticos. Con unos pantalones negros, un jersey del mismo color, un gorro y un antifaz (o una venda con dos agujeros para los ojos) puedes transformarte en un caco saqueador, y si te vistes de negro y te pones un sombrero, con maquillaje blanco y unos guantes claros puedes ser un mimo. Con una falda larga y unos pañuelos puedes leerle el futuro a tus amigos como una auténtica pitonisa. Si tienes leotardos o medias puedes rellenarlas de tela o algodón y crear unos tentáculos, un divertido disfraz para los más pequeños, como proponen en 'Facilísimo'. Si eliges una camiseta blanca y le pegas tiras de cinta aislante roja, añadiendo al look un gorro de lana, unas gafas de plástico, unos vaqueros y un bastón te convertirás en Wally, y... ¡a ver quién te encuentra!

Utensilios domésticos

Rebusca entre los cajones de la cocina y piensa en todo lo que puedes hacer con los cubiertos, las espumaderas, coladores, escurridores, embudos y botes. Si forras una caja de cartón con papel de plata y te decoras la cabeza con cazos de hojalata colocados de la manera más bizarra podrás ser un robot o un extraterrestre, o en el monstruo del lago, como proponen en 'Sew old, sew new'. Con los embudos podrás fabricarte narices y orejas imposibles, y si te pones dos coladores en los ojos te metamorfosearás en un insecto kafkiano.

En el botiquín encontrarás vendas para salir a la calle como una momia, o como un accidentado. Los platos y vasos de plástico te pueden servir también para improvisar sombreros y máscaras, y con lana puedes crear pelucas, trenzas, bigotes e incluso crestas, si endureces los hilos con cola. Los globos también son una buena idea para convertirte en un racimo de uvas o, si te vistes de rojo y te los atas a la espalda, llevar oxígeno al cerebro, como los glóbulos rojos de la vida es así. Con las botellas vacías de refresco puedes inventar una súper mochila a propulsión para viajes intergalácticos, como la que nos enseñan en 'Doodlecraft'.

Un taller de máscaras recicladas

Si tu fiesta se parece más al Carnaval de Venecia, también puedes usar el reciclaje para construir tu máscara. Rompiendo en tiras varios papeles de periódico, los sumerges en cola para conseguir que puedan adherirse a la superficie que elijas, que puede ser un globo hinchado o la cara de un compañero (si eliges ésta opción no olvides cubrirle antes el rostro con unas gasas). Ve poniendo las tiras encoladas sobre la superficie que quieres que lleve la máscaras. Cuando consigas un grosor de un centímetro, déjala secar.

Luego puedes amasar la mezcla de periódicos y cola para añadir narices, orejas, ojos saltones, verrugas o dientes. No olvides dejar un hueco para poder respirar y hacer los agujeros de los ojos. Cuando se seque del todo píntala de blanco y, un rato después, estará lista para que la colorees cómo prefieras.