‘Frágiles’

Pablo es un fisioterapeuta vocacional, con unos métodos de terapia totalmente atípicos. Conoce a la perfección el cuerpo humano, pero tiene muy claro que tras el dolor físico de sus pacientes se esconde un dolor emocional, una historia que contar y una posibilidad de superación. Por este motivo, a la vez que trata sus lesiones indaga en sus emociones y estados de ánimo. No le importa preguntar de forma abierta para saber cómo se sienten, ya que considera que los sentimientos influyen de forma notable en su recuperación.

Jamás trata a sus pacientes como enfermos sino que asume cada caso como un nuevo reto que superar: desdramatiza la situación, utilizando su sentido del humor, entusiasmo e intuición para llegar a la raíz de su dolencia y desenmascarar su causa. Además de los casos clínicos y a través de sus pacientes, la serie aborda la historia personal y las propias heridas que arrastra el protagonista ya que, como él mismo cree, "todos tenemos algún roto".

Lola padece el síndrome de Asperger, enfermedad que le produce una aversión compulsiva al contacto físico, entre otros síntomas. Una lesión en la espalda le lleva a visitar la consulta de Pablo, que abordará este caso como un verdadero reto con el que irá más allá de sus conocimientos médicos como fisioterapeuta para lograr paliar su dolencia. Lola tiene una memoria prodigiosa que le permite recordar hasta el último detalle de los temas que lee y le resultan atractivos, en especial el mundo de los peces, del que sabe absolutamente todo. No tolera la mentira y tiene un cuaderno en el que apunta lo que aprende cada día para comprender mejor a la gente que le rodea.

Teresa era hace seis meses una mujer vital que ejercía como ejecutiva en una multinacional. Pero su vida cambió de forma radical tras sufrir un accidente de tráfico que le dejó postrada temporalmente en una silla de ruedas. Tras casi seis duros meses de tratamientos sin resultados positivos, las esperanzas de Teresa en volver a caminar se han esfumado y con ellas las ganas de vivir.

Tras el accidente de Teresa, su marido decidió dejarlo todo para ocuparse de ella las 24 horas del día. Él se encarga de hablar con los médicos, administrarle los medicamentos, asearla y darle de comer. No obstante, estas muestras de amor incondicional pronto levantarán las sospechas de Pablo.

Dolores es la madre de Lola, una mujer entregada por entero al cuidado de su hija enferma. Tiene una actitud positiva, valiente, constructiva y sin limitaciones. En lugar de lamentarse y sufrir por tener una hija con un grave problema de salud, Dolores siempre encuentra el lado positivo de todo lo que le rodea, incluso cuando la situación es dramática. El cometido diario de esta madre "coraje" es lograr que su hija sea feliz y encuentre su lugar en el mundo.

Las hermanas Ana y Pilar conocieron y se enamoraron a la vez de Pablo, pero él eligió a Ana, por lo que Pilar se prometió a sí misma, por respeto y amor hacia su hermana, no entrometerse nunca en esta relación. Pero a veces no es fácil controlar los sentimientos: una noche de copas, Pilar perdió ese control emocional y terminó en la cama con Pablo, un error que marcará para siempre la vida de los tres protagonistas.