Anulado el concurso de la TDT en Madrid

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha anulado la orden 298/05 de la Comunidad de Madrid por la que se resolvió el concurso público para la adjudicación de concesiones de la televisión digital terrestre (TDT) en esta región, decisión que el Ejecutivo autonómico ha anunciado que acatará.

Este concurso dejó fuera a Localia, la red de televisiones locales del Grupo PRISA, que el pasado 13 de noviembre decidió el cierre de ésta, entre otras razones, porque "la arbitrariedad política con la que se han resuelto algunos concursos de TDT regional han agravado la situación de forma determinante".

Los grandes beneficiados fueron la Cope; su locutor estrella, Federico Jiménez Losantos; Antena 3 y empresarios afines al Partido Popular.

El tribunal ha argumentado que la presidenta regional, Esperanza Aguirre, no motivó la adjudicación de las licencias.

Así, el tribunal ordena retrotraer las actuaciones hasta el momento inmediatamente anterior a la elevación de la propuesta.

El TSJM ha dado un plazo de un mes a la Mesa de Contratación para elevar de nuevo su propuesta y otro mes a partir de entonces al órgano de contratación para adoptar una decisión definitiva.

La Comunidad de Madrid, a través del secretario general del Consejo de Gobierno regional, Salvador Victoria, ha anunciado que no va a recurrir este fallo, ya que sólo advierte la existencia de "un defecto puramente formal" que subsanará con un "documento complementario" que la Administración regional presentará en el mes que se le da de plazo.

Victoria ha asegurado que el fallo del TSJM "no dice que la adjudicación se hiciera de forma arbitraria, ilegal o injusta" y que en contra de lo que pedían los recurrentes (Localia, entre otros), "no anula el concurso, que sigue siendo válido, ni dice que tengan derecho a obtener una concesión".

Por su parte, la Comisión Ejecutiva del Partido Socialista de Madrid ha emitido un comunicado donde pone de manifiesto su "preocupación por la política de comunicación" de la Comunidad que, dicen, está "movida por intereses ideológicos" que han contribuido a "desestabilizar el sector".