El Gobierno se inhibe en la gestión de los derechos deportivos

El Gobierno no dictará una ley que obligue a los clubes de las Ligas BBVA y Adelante a negociar de forma colectiva los derechos de televisión de las próximas temporadas y cree que no se les debería permitir invertir "más del 70 ó 75%" de sus ingresos en salarios y fichajes de los jugadores, según afirma el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky.

"No creo que estés feliz viendo un Gobierno intervencionista. Es un asunto que tienen que resolver ellos. Tiene que haber una autorregulación. Todos los clubes tienen que sentarse en una mesa y buscar el mejor modelo", indica Jaime Lissavetzky.

Al contrario que en otras ligas, caso de la Bundesliga o la Premier League inglesa, en España los clubes negocian de forma individual sus acuerdos con los operadores televisivos y algunos de ellos, como el Real Madrid y el F.C. Barcelona, han alcanzado acuerdos cercanos a los 150 millones de euros por temporada.

El pasado 10 de mayo, la Junta de Primera División de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) anunció que estudiaría, a final de la presente temporada, un nuevo modelo de competición y explotación del fútbol "exclusivamente" para la Liga BBVA, que negociaría sus derechos televisivos de forma colectiva y se separaría de la Liga Adelante.

Poco después, diez equipos de Primera (Osasuna, Xerez, Málaga, Tenerife, Zaragoza, Sporting, Almería, Espanyol, Valladolid y Mallorca), junto a los 22 de la Liga Adelante, asistieron a una Asamblea de la LFP que instó al Gobierno a regular por ley la venta colectiva de los derechos televisivos.

No obstante, clubes como el F.C. Barcelona, Real Madrid, Valencia, Atlético, Deportivo, Athletic, Getafe, Sevilla y Villarreal se mostraron contrarios a dicha venta centralizada de los derechos de televisión antes de la temporada 2010-2011.

En este sentido, Lissavetzky afirmó que la situación ideal sería seguir el modelo inglés. "Hay que tener este concepto de solidaridad. Si este concepto es por un acuerdo entre todos los clubes, mucho mejor", comentó Lissavetzky, quien anunció que la nueva Ley del Deporte creará también un órgano independiente para controlar las finanzas de los clubes que, incluso, puede excluirles de la competición.

"Tenemos que aprender de las subprime. Por eso habrá un órgano de control económico de carácter independiente que permita participar en competiciones o no participar según como esté tu cuenta de resultados", manifestó.

Por otro lado, Lissavetzky también adelantó que el Gobierno revisará la normativa que regula la Ley Concursal, a la que se han acogido muchos clubes profesionales en los últimos años para sanear sus cuentas. "No queremos que los clubes se aprovechen de una situación en detrimento de otros", manifestó.