El fin de la 'guerra del fútbol' es sólo un "armisticio", matiza Roures
mediaset.esNo ha acabado la guerra del fútbol. Más bien, "se ha firmado un armisticio", matizó anoche Jaume Roures en guerra del fútbol.El larguero, "Ahora estamos viendo cómo se resuelven los daños colaterales", en especial el que afecta a los clubes "que se decantaron por una de las opciones" (la de Mediapro, impidiendo entrar en los estadios a las cámaras de Audiovisual Sport).
Unos equipos que recibirán algo menos de 600 millones de euros por temporada por la cesión de sus derechos audiovisuales. Y que podrían obtener, según Roures, 150 millones más si no existiera la ley que obliga a ofrecer un partido de Liga en abierto por jornada.
A este respecto, Roures anunció que en los próximos días se conocerá qué cadena ofrecerá el encuentro de los sábados desde el próximo septiembre, entre las dos ofertas recibidas, de Telecinco y La Sexta.
Preguntado por las retransmisiones de esta última (de la que es accionista de referencia), reconoció que se le ponía en un "aprieto" cuando admitió que le gustan más las de Canal + o TV-3.
Asimismo adelantó que "la oferta ganadora puede ser en exclusiva o dejar la puerta abierta a las autonómicas".
Pero la exclusividad está en cuestión. En el pliego del concurso se ofrece a los operadores esta opción "en todo el territorio español", pero esos derechos ya están vendidos a Canal 9 y TV-3.
Una cadena pública esta última que, según el informe de los ejercicios 2005 y 2006 de la Sindicatura de Cuentas presentado ayer arroja unas pérdidas de 180 y 216 millones, respectivamente, con una deuda superior a los 1.000 millones de euros .
Ha sido precisamente la complicidad de los canales autonómicos y los presupuestos públicos lo que ha servido de balón de oxígeno a la productora a la hora de rentabilizar la inversión en la compra de derechos, primero del fútbol y luego de la fórmula 1. Las cadenas de la Comunidad Valenciana, Cataluña, Aragón, Murcia, Canarias, Baleares y Galicia recompraron los partidos de la Liga a La Sexta para emitir en simultáneo en sus respectivos ámbitos.
José Ramón de la Morena, que recibía a Roures en El larguero tras considerarlo durante años "enemigo público número 1", admitió su El larguero desconcierto ante el pacto Mediapro-Prisa, después de haberse "pringado" en la defensa de las tesis de esta última , propietaria de la cadena SER .
Pese a todo, en algún momento recordó su sospecha de que la productora catalana "tenía comprada" a la Liga de Fútbol Profesional, que le confeccionaba un calendario de partidos a medida de La Sexta y en contra de los intereses de Digital +.
Ya en el ámbito de lo personal, De la Morena describió a su entrevistado como alguien que "aposta cuida poco su aliño indumentario" y se interesó por si a "un rojo de pedrigrí le jode que le vean como un empresario". Roures replicó: "Yo pongo la cara para que intentéis rompérmela".
El responsable de Mediapro reclamó "actitud y lealtad" como condiciones indispensables para seguir negociando con la compañía que preside Ignacio Polanco.