La historia de superación de Adela.
Adela Montaño, representante de la Red Estatal de Mujeres de SALUD MENTAL ESPAÑA, nos regala un testimonio valiente sobre cómo la aceptación y el apoyo mutuo son las llaves para convivir con un trastorno mental.
En el marco de nuestro compromiso con el bienestar emocional, en 12 Meses 12 Causas queremos dar voz a historias que rompen muros. La de Adela Montaño no es solo una historia sobre salud mental; es una lección de vida sobre cómo transformar la vulnerabilidad en una herramienta de cambio social.
"Mi trastorno es mi amigo"
A menudo, el estigma nos empuja a ver los problemas de salud mental como un enemigo externo. Sin embargo, Adela propone una mirada diferente: "Mi trastorno es mi amigo; si lo haces tu enemigo, malamente nos va". Para ella, el camino no fue lineal. Tras años de normalizar el malestar y el cansancio extremo, llegó un momento en el que la realidad se impuso: la necesidad de pedir ayuda profesional.
El diagnóstico como liberación
Frente al miedo que suele generar una "etiqueta" médica, Adela recuerda el momento de su diagnóstico como un punto de inflexión positivo. "Me sirvió para ubicarme, para saber qué era lo que tenía", explica. Poner nombre a su sufrimiento no fue un estigma, sino el primer paso para entender sus propios procesos y empezar a construir una vida plena.
El activismo: Una tabla de salvación
Si algo define la recuperación de Adela es su entrega a los demás. Su entrada en el movimiento asociativo y en la Red Estatal de Mujeres fue, en sus propias palabras, su "tabla de salvación".
- El poder de la red: El voluntariado le permitió pasar de ser "ayudada" a ser quien ayuda, devolviéndole la confianza y el sentido de pertenencia.
- Contra el estigma sutil: Adela denuncia la falta de credibilidad que a veces sufren las personas con trastornos mentales en su día a día y reclama una sociedad que no juzgue, sino que escuche.
Un mensaje para todos
Desde 12 Meses 12 Causas nos sumamos al mensaje final de Adela: no hay que tener miedo. Ni a las personas que transitan por un problema de salud mental, ni a pedir ayuda si sentimos que nuestras fuerzas flaquean.
"Escuchadnos", pide Adela. Porque en un mundo que a veces parece ir demasiado rápido, la empatía y la escucha activa son la mejor medicina para el alma.
Para más información y recursos, visita: www.consaludmental.org
