El colegio Miguel de Cervantes y su proyecto 'La isla de la vida' que cuida corazones

12 Meses 10/05/2018 17:57

Como ya sabéis, este año tenemos un gran objetivo: que 'La Tribu del corazón' sea la comunidad más grande jamás conocida que cuida y mima su salud cardiovascular y la de sus miembros. ¡Y no hay edad ni condición para pertenecer a la tribu! Solo hay que querer tener un corazón sano. En nuestra búsqueda incansable, nos hemos encontrado con la tribu del colegio Miguel de Cervantes de Asturias, que el año pasado recibió el premio europeo #BEACTIVE por su proyecto 'La isla de la vida'. En él, la escuela ponía el foco en mejorar la alimentación y la salud de sus alumnos implicando a las familias y a toda la comunidad.

No obstante, esta no es la única iniciativa que Geles García, la directora, y el colegio han puesto en marcha para los más pequeños de la casa. Nos entrevistamos con ella para saber más sobre este centro que hace tribu más allá de las aulas.

¿Qué son los premios #BEACTIVE? ¿Cómo surgió la idea de presentarse?

Es un premio convocado por la Unión Europea a través del área de educación y gestionado por el Consejo Superior de Deportes de España. Cuando salió la convocatoria vimos que se ajustaba a nuestros planes de salud, deportes y educación del colegio y finalmente quedamos finalistas junto a un colegio de Polonia y otro de Finlandia. La decisión definitiva fue en una gala en Marsella, donde nos entregaron el premio, con una dotación económica de 5.000€.

¿Esto es lo que habéis llamado ‘Proyecto Isla de la Vida’? ¿En qué se basa?

Elegimos ese nombre por el entorno en el que estamos. Un barrio periférico altamente contaminado, donde estamos rodeados de edificios y casi no vemos el sol por las aberraciones urbanísticas de los años 60. El colegio estaba en un descampado cuando lo hicieron, pero fueron construyendo alrededor. De ahí el juego de aislados con isla.

Observamos los problemas de sobrepeso, obesidad, mala alimentación, el tipo de bocadillos que traían los niños para los recreos, la bollería industrial… Ahí fue cuando decidimos que desde el colegio teníamos que intervenir más allá de las aulas para dejar de estar aquí aislados.

El proyecto partió de estudios que hizo el propio alumnado sobre el sobrepeso midiendo su estatura, calculando el índice de obesidad, que después representaron en clase de matemáticas con funciones y estadísticas. Con todos esos datos surgió el plan para mejorar la situación y también intentamos unirlo al currículo escolar.

El año pasado organizamos un dual-long en el otro extremo de la ciudad en el que los alumnos tenían que ir en bicicleta 8-10km. Y en otra instalación municipal tuvieron que correr. A la actividad acudieron las familias, las entidades, deportistas que nos apadrinaron. Más de 500 personas atravesaron los puentes de salida de nuestra isla. Fue un éxito dentro y fuera de las aulas.

Con el dinero del premio, comprasteis un desfibrilador para el centro…

Sí, compramos uno semiautomático y toda la plantilla del centro hicimos una formación específica. De cara al Día mundial del corazón, queremos organizar un evento y sacarlo a la calle en el barrio para que sea nuestro alumnado el que preste servicio a la comunidad tras una pequeña formación.

¿Tenéis más proyectos?

Tenemos mil proyectos. Hay un plan de actividades deportivas que está nivelado por cursos. En primero y segundo, se participa en el plan escolar de natación. En tercero se hacen proyectos municipales, como una iniciación al golf. En cuarto, se hace skate y escalada, y este año hemos añadido también buceo y natación sincronizada. En quinto, se hace surf; en sexto, piragüismo y la semana blanca, para ir a esquiar. Al final de cada trimestre la actividad se hace festiva con el objetivo de que también intervengan las familias.

Además, trabajamos la prevención de salud mental, grupal y social, a través de programas de prevención de abuso escolar. Tenemos un programa que empezó en nuestro colegio junto a otro de Gijón y se basa en las emociones. Todos los días en diferentes momentos de la mañana hay unos iconos con distintas emociones y los alumnos pinchan en cómo se sienten con total anonimato.

Queda claro que os preocupáis por cuidar la salud y el corazón de vuestros alumnos, ¿qué os parece promover la salud cardiovascular entre los más pequeños con el baile de la tribu?

Promocionar la actividad física a través del baile, coreografías, música, etc., motiva mucho a todo el alumnado, especialmente a las niñas. Además, se puede aprovechar para invitar a las familias a participar activamente en estos bailes. Es una estupenda y divertida idea de promocionar la actividad física. Nos encantaría poder participar en vuestro concurso #bailandoconlatribu y haremos todo lo posible.

¿Qué os parece que 12 Meses y todos los canales de Mediaset España se impliquen con campañas como 'La tribu del corazón'?

El papel de los medios de comunicación es fundamental en cualquier ámbito. Como profesorado podemos llegar a un número determinado de alumnos y un entorno mucho más pequeño que cualquier medio de comunicación. Una campaña a nivel nacional va a llegar a muchísima más gente y también nos sirve en el colegio para que sea el punto de partida para desarrollar nuestros proyectos. Aún se cree que al colegio se viene a aprender matemáticas y lengua, lamentablemente, y hay sectores que no ven estas labores como educativas, pero cuando un medio la lanza, facilita datos y salta las alarmas, lo hace mucho más sencillo para el centro de aplicar medidas y campañas. La difusión de los medios de comunicación es algo importantísimo y ojalá todos los medios estuvieran a tope con esto.