Channel 4 no puede reinterpretar el cambio climático

Un documental del canal de televisión británico Channel 4 que cuestionaba el origen del cambio climático (vendido a 31 país y editado en DVD) quebró la normativa que pesa sobre la televisión y tergiversó las opiniones de algunos de los expertos, según el regulador de las medios de comunicación en Reino Unido, Ofcom.

Después de que particulares -como el hasta el pasado año máximo consejero científico del Gobierno británico, David King- o colectivos como el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, en sus siglas en inglés), denunciasen la manipulación de La gran estafa del calentamiento global (The Great Global Warming Swindle), Ofcom determinó que sus protagonistas haban sido tratados "injustamente".

Tras una investigación, el regulador consideró que el documental, escrito y dirigido por Martin Durkin, se saltó varios artículos del Código de Televisión, incluidas unas críticas a comentarios de King en la Cámara de los Comunes que no había realizado nunca, y denunció las "significativas acusaciones" expuestas sin haber ofrecido una "posibilidad apropiada y oportuna" de respuesta.

Con todo, según el regulador, la parcialidad y la omisión de datos no conllevó que los espectadores resultasen "materialmente engañados" como para estipular daños o incluso un delito por el programa, emitido el 8 de marzo de 2007 como desafío a la teoría de que el hombre es el principal responsable del calentamiento global.

Los científicos y expertos que intervenían durante el metraje mantenían que el consenso existente al respecto se basaba en investigaciones poco sólidas y tenía motivaciones políticas. Por su parte, Channel 4 alegó que el documental era una "polémica creada" que pretendía examinar el debate sobre las causas del calentamiento global y ofrecer alternativas.

Sin embargo, sus contenidos motivaron la presentación de tres denuncias individuales, entre las que se incluyen las del propio David King o el IPCC, a las que se sumaron 265 elevadas por los ciudadanos y una colectiva promovida por ocho personas, entre las que figuraban científicos, que a lo largo de 176 páginas daba cuenta de un total de 137 atentados al código televisivo.

Mientras, Ofcom determinó que la última parte rompió la "debida imparcialidad" exigida por las normas británicas en materia de retransmisión y sus autores evitaron la inclusión del "necesario amplio marco de las significativas visiones" en la materia, especialmente cuando se refirieron a las políticas adoptadas por la ONU. Por ello, Channel 4 deber emitir un resumen de las conclusiones del ente regulador.