Una "pataleta", según la Cope

Fernando Giménez Barriocanal, consejero delegado de Cope.mediaset.es

La cadena COPE ha acusado a la SER de desconocer las reglas del mercado libre "y el más elemental fair play (juego limpio)", y considera que las acciones legales que ha anunciado tienen un recorrido muy escaso.

La emisora de la Iglesia ha colgado un nota editorial en su página web en la que responde a las declaraciones de los responsables de la SER, que han acusado a la cadena COPE de haber pretendido desmantelar su equipo de deportes y han anunciado acciones legales por considerar que han violentado las leyes que regulan la libre competencia.

En su nota, la COPE corrobora que ha reforzado su equipo de Deportes para la próxima temporada con el fichaje de un conjunto de profesionales "de la máxima solvencia", lo que ha despertado -añade- expectación entre los oyentes y en el mercado radiofónico.

Para conseguirlo, esta emisora aclara que ha acudido al mercado "sin más avales que el prestigio de su marca y un proyecto profesional que ha convencido a estos comunicadores".

En la nota, los responsables de esta emisora expresan que les ha producido "estupor" la reacción de la cadena SER, que han calificado de "desaforada", y han acusado a la emisora del grupo Prisa de desconocer las reglas del mercado libre y el "fair play".

Según la COPE, la "pataleta" que han escenificado algunos dirigentes de la SER tiene "muy escaso recorrido", tanto en el ámbito legal como en el de la opinión pública. "Camuflar la propia debilidad con manipulaciones groseras sobre los dineros de la Iglesia es algo más que patético", agrega la nota editorial de la COPE.

La COPE, añade, es una radio comercial y generalista "que lucha cada día en el mercado para conseguir los recursos necesarios para su actividad", y asegura que "jamás" se ha financiado con fondos procedentes de la Asignación Tributaria.

Considera además "un sarcasmo" la preocupación de los responsables de la cadena SER por los párrocos rurales o por los trabajadores de la COPE.

La emisora de la Iglesia ha aclarado que su responsabilidad es "ofrecer una programación fiel al Ideario de COPE, atractiva y solvente", y que están trabajando para ello, "para esperanza de muchos y preocupación de unos pocos".