El presentador al que sólo le queda un telediario

Patrick Poivre D'Arvor.mediaset.es

Se enteró de su despido por las portadas de los periódicos hace un mes. Y ya ha recibido la "carta", según ha confirmado a la emisora France Inter. TF-1, propiedad de Martin Bouygues, amigo personal de Nicolás Sarkozy, le ha propuesto quedarse, reconoce PPA, pero se marcha porque no tiene intención de "quedarse en el armario".

PPA llevaba más de 20 años al frente del 20 heures, el telediario de prime time de TF-1, la mayor cadena privada. Era el presentador de referencia, como prueban los últimos datos de audiencia: de enero a julio de este año, una media de 8,1 millones de espectadores y una cuota del 35%.

Pero ha puesto tanto empeño en escenificar su independencia frente a la dirección de la cadena que al final ha pagado la factura. Ya en la campaña por las presidenciales, Sarkozy aprovechaba cualquiera de las entrevistas con PPA para reprocharle su apoyo a la socialista Segolene Royal.

La guinda se produjo cuando el presidente estrenó su cargo en una cumbre del G8. Apareció en una rueda de prensa trastabillándose, después de encontrarse con el ruso Vladimir Putin, lo que dio pie a bromas sobre los efectos del vodka. En una entrevista posterior, PPA comparó a Sarkozy con un "niño pequeño" y "excitado".

Le sustituye Laurence Ferrari, hasta ahora en Canal + Francia, y a quien en su momento se le atribuyó falsamente un idilio con Sarkozy.

En el asunto ha llegado a intervenir el Senado francés. Los representantes socialistas reclaman una comisión de investigación parlamentaria sobre la independencia de los medios y sobre las "relaciones manifiestas entre ciertos actores políticos con los actores económicos prioritarios de órganos de prensa y medios audiovisuales".