"Si supiéramos el secreto del éxito de algunas series, las produciría la banca"

Héctor, el personaje que interpreta Luis Merlo en El internado (Antena 3), ha dado un giro radical a su vida. Vive en el pasado y no se perdona haber faltado a la promesa que le hizo a su hermana. El actor reconoce que la serie es "oscura", que en ella suceden cosas impensables. Y ahí radica, para el actor, el éxito.

En esta nueva temporada su personaje ha dado un giro muy importante...

La audiencia va a conocer un Héctor que se derrumba después de ser, durante todas las anteriores temporadas, un personaje muy sólido. Ahora, el pasado de Héctor tiene una gran importancia y está más pendiente de resolver esos conflictos que los del presente.

¿Cree que todos tenemos un lado oscuro?

Sí, y además es sanísimo sacarlo a pasear de vez en cuando, pero sin daños colaterales, claro.

¿Cuál es el lado oscuro de Héctor?

Héctor es un personaje que pertenece al romanticismo. Su lado oscuro es no haber sido capaz de cumplir la promesa más importante para él, cuando vive por y para cumplir las promesas de sus alumnos y su entorno.

¿Cómo es posible que una serie tan ficticia y tan oscura como El internado

El reflejo de lo cotidiano en el mundo de la ficción es algo que en este país siempre ha existido. No nos hemos atrevido tanto como los americanos o los ingleses a jugar con lo imposible, porque un lugar como El internado es imposible, pero dentro de la literatura, el cine y el teatro todo es posible. El valor de la productora a jugar con un imposible, donde existe un hombre con elefantiasis, que mide más de tres metros, hace que aunque sean cosas imposibles, parezcan a la vez muy cercanas.

Entonces, ¿lo imposible es la clave de El internado

Si supiéramos el secreto de por qué unas series gustan y otras no, las produciría la banca y no estaríamos en ningún tipo de crisis. La fórmula mágica es que no hay ninguna fórmula. El equipo de una serie pone las mismas ganas en todos los proyectos, en los que ve todo el mundo y en los que no ve nadie. Nunca se sabe cuándo un proyecto va a conectar o no. Un éxito en esta profesión es una maravilla.

¿Cómo ve la producción nacional?

Quiero que la gente la vea porque es muy buena. Que se den cuenta y nos den fuerza a los actores para seguir haciendo buenos productos. Cada vez hay más más calidad y eso puede generar espectadores que se fidelicen.

¿Le gustaría interpretar algún personaje en concreto?

No me considero un actor de repertorio. Me gusta, tanto en la vida como en mi profesión, aceptar las cosas como llegan. En mi carrera he tenido que elegir y varias veces me he confundido, pero en eso también consiste el dedicarse a la interpretación.