Terapias fraudulentas y viviendas públicas en ruinas, 'En el punto de mira'

Terapias fraudulentas y viviendas públicas en ruinasEl reportero Juan Carlos González investiga a un médico que lleva años recomendando el consumo de una sustancia parecida a la lejía para curar el cáncer.

Cuando la salud está perdida, cualquier alternativa por increíble que parezca puede parecer buena, principalmente cuando la medicina tradicional ya ha dado la espalda. Sobre estas opciones, que en la mayoría de los casos se convierten en terapias no alternativas, sino falsas, arranca la entrega de En el punto de mira el 30 de octubre en Cuatro (22.45); el segundo reportaje de la noche también hablará sobre un tema sensible: el mal estado de algunas viviendas públicas.

Según un estudio de la Universidad de Alicante, al año mueren en España 22.000 pacientes por abandonar los tratamientos oficiales y someterse a terapias fraudulentas. El reportero Juan Carlos González investigará a un médico colegiado que lleva años recomendando consumir una sustancia prohibida por la Agencia Española del Medicamento para consumo humano. Este doctor asegura que un compuesto químico similar a la lejía cura graves enfermedades. Para los defensores de la esta práctica la teoría es sencilla: si sirve para desinfectar lo que toca, también puede hacerlo con el cuerpo humano.

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En el punto de mira contactará con pacientes y con el propio facultativoEn el punto de mira y también hablará con sus colegas del Colegio de Médicos de Palencia para conocer su opinión sobre este peligroso método. Por su parte, María Miñana investiga a una científica del CSIC en cuyos experimentos ha logrado devolver la movilidad a ratas tetrapléjicas. Al intentar extrapolar sus avances en personas, los resultados no fueron los mismos. Esta científica acabó detenida por la Guardia Civil, junto a su marido, acusada de estafa y de un delito contra la salud pública por utilizar la homeopatía para curar lesiones medulares de personas. Con esta presunta estafa ha podido ganar más de un millón de euros.

Acceder a una vivienda pública es el sueño de muchas personas, pero el sueño puede convertirse en una pesadilla y los compradores, en los protagonistas de Esta casa es una ruina. Mireia Llinares investiga un edificio en el CabanyalEsta casa es una ruina, en Valencia: 168 viviendas en las que los propietarios viven entre okupas, suciedad y ruinas. Las zonas comunes están destrozadas y muchas de las viviendas son inhabitables.

A través de distintos testimonios, el reportaje desvelará cómo se ha llegado a esta situación y pedirá explicaciones a los responsables. Muchas de estas viviendas viven en un limbo legal. No se pueden vender, alquilar ni reformar porque la intención del ayuntamiento era derribarlas. Ahora la situación está paralizada.

Carla Sanz también investiga un edificio en Madrid de vivienda pública. Los pisos de nueva obra fueron entregados a los propietarios llenos de desperfectos: grietas goteras, y problemas de aislamiento, entre otros. El reportaje de En el punto de mira: inquilinos, constructora y Comunidad de Madrid.