‘En terapia’ (Canal + 1)

5 pacientes. 30 minutos por consulta. 9 sesiones. En terapia permite al espectador observar desde una posición privilegiada el proceso que sigue un prestigioso psicólogo para tratar a las personas que acuden a su consulta, a la vez que él mismo se enfrenta a una importante crisis personal y matrimonial.

Esta versión argentina adapta la brillante serie israelí del mismo nombre, después de que lo hiciera HBO en Estados Unidos.

La emite Canal + 1, de lunes a viernes a las 15.00 y a las 21.00 Canal +2, desde el 19 de noviembre.

Esta ficción está completamente apoyada en la actuación y los guiones, y provoca la sensación de estar asistiendo a un momento íntimo y real.

Cada uno de los 45 capítulos de esta primera temporada está compuesto por una conversación de media hora entre el psicólogo y uno de sus pacientes, excepto cuando el protagonista se reúne con su supervisora para descubrir sus propios problemas y reflexionar sobre su trabajo con las personas que acuden a la consulta.

La serie se centra en las sesiones de psicoanálisis del licenciado Guillermo Montes a lo largo de su semana, mostrando en cada episodio media hora de terapia con sus diversos pacientes.

Marina es una paciente histérica de 35 años a la que Montes trata los lunes. Al comienzo de la serie, le revela a su psicólogo, después de un año de terapia, que está profundamente enamorada de él.

Los martes se enfocan en la terapia de Gastón Ramírez, un rígido policía del grupo GEOF que entra en una crisis de identidad que toca las relaciones con su familia y su identidad sexual.

La sesión de los miércoles corresponde a Clara, una bailarina clásica de 16 años que asiste a terapia tras un supuesto intento de suicidio y es incapaz de relacionarse con su padre por la relación tóxica que los une.

Los jueves es el turno de esta pareja, que comienza las sesiones por su desacuerdo ante la noticia de un embarazo que no saben si interrumpir o no, y cuyo tratamiento se complica debido a que no pueden mantener su relación sin la confrontación permanente.

Los viernes, Montes acude al consultorio de su supervisora y antigua maestra Lucía Aranda, con quien contacta después de una pelea que mantuvieron hace años, ya que comienza a sufrir una crisis de la mediana edad en relación con su vocación profesional, su madurez, su matrimonio que comienza a desmoronarse, el alejamiento de sus tres hijos y sus sentimientos hacia Marina, que empiezan a confundirlo.